Parece que va a llover,
dices de repente
rompiendo este silencio
tan cruel.
Yo te miro a los ojos
sin creer lo que
mi alma ve
y es que la distancia
que nos separa
es el doble que ayer...
No sé que hacer
salgo a la calle
y comienza a llover,
dejo que el agua me empape
y calme mi sed...
Él ya se ha marchado
y no va a volver.
Ya sólo queda la tormenta
y mi corazón mojado
que se ha muerto sin él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario